Dónde comer en Oviedo: restaurantes, sidrerías, chigres y más
Asturias es sinónimo de buen comer y la capital del Principado no iba a ser menos. Vete preparando con unas buenas sesiones de ejercicio para perder peso antes, porque, en cuanto te digamos dónde comer en Oviedo, vas a engordar. Y lo sabemos de primera mano. En un par de días vimos cómo la aguja de la báscula hacía una excursión hacia números más altos… Pero bueno, de alguna forma hay que compensar todas las calorías que gastarás haciendo turismo y tachando lugares de nuestra lista de sitios que ver en Oviedo, ¿no?
A pesar de que no hay restaurantes en Oviedo con estrella Michelin –en Gijón hay dos, si estás pensando en visitar también la costa, no dejes de echar un vistazo a nuestras recomendaciones sobre dónde comer en Gijón–, la calidad está asegurada. Ya sea comida tradicional, restaurantes más originales, sidrerías… acabarás por chuparte los dedos.
Dónde comer en Oviedo: ¿restaurante o sidrería?
No hay por qué elegir, pero sí que es necesario saber la diferencia. Una sidrería, chigre en Asturias, es un local en el que se sirve sidra. Parece de cajón, pero es la diferencia principal. Se sirve sidra natural y, en la mayoría, hay escanciadores que se encargan de ponerte culines –que no todos los asturianos saben escanciar–. Los menús suelen estar compuestos por platos tradicionales y el ambiente es especial.
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Pregunta en la oficina de turismo por los cantos de chigre. Los parroquianos de las sidrerías, finalizadas las viandas, sacan sus instrumentos y comienzan a cantar para deleite de los demás comensales. Tuvimos la oportunidad de cruzarnos con los cantos de chigre en La Pumarada.
Los restaurantes, en cambio, no necesitan presentación. Son iguales a los de medio mundo. La comida puede ser tradicional, de autor, moderna… aunque pueden tener sidra.
Si pasas un par de días, o incluso sólo uno en Oviedo, puedes comer en un restaurantes y cenar en un chigre –los cantos son más habituales después de la cena–.
Algunos de los mejores restaurantes de Oviedo en el centro
No te vamos a hacer andar mucho para buscar el lugar donde comer. Sin salir del casco histórico te recomendamos tres de los mejores restaurantes de Oviedo.
La Corte de Pelayo: un buen restaurante donde comer cachopo y comida típica asturiana como la fabada
Empezamos por el clásico asturiano: la fabada. Sí, porque el cachopo, a pesar de su fama, no es un plato tradicional de la gastronomía astur. Eso sí, ¿quién se va a resistir a probarlo? La Corte de Pelayo ganó el premio al mejor cachopo de Asturias en su primera edición en 2014 y damos fe de que está delicioso –para compartir, ¿eh?–. Por cierto, si sientes curiosidad, en 2018 el premio se lo llevó la sidrería Pichote, también de Oviedo.
Pero nos despistamos –se nos nota un poco carnívoros–, hablábamos del plato tradicional por excelencia: la fabada. Parece fácil, pero también tiene arte y hay que saber desde elegir los ingredientes hasta el momento en que dejarla tranquila para que se haga sin prisa. Y de eso también saben mucho en la Corte de Pelayo, su fabada fue finalista en el Campeonato de mejor fabada del mundo de 2018. El compango –el chorizo, la morcilla y la panceta– y las fabes se sirven separados.
Nosotros nos lanzamos a por el premio gordo: fabada de primero y cachopo de segundo. ¿Recomendable? Por supuesto. Pero ten en cuenta que las raciones en Asturias no son de menú degustación. Eso sí, deja hueco al final para un postre de arroz con leche requemado.
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La Corte de Pelayo también ofrece menú del día con primero, segundo, postre o café y bebida por 15 €. Puedes ver los platos que incluye cada día en su página web.
Precio: nosotros gastamos unos 30 € por persona (sin vino).
Dirección: Calle San Francisco, 21.
Web: lacortedepelayo.com
La Taberna del Zurdo: un restaurante más original y de moda
No sólo hay pinchos en el País Vasco. En la capital de Asturias nos encontramos con un referente –ganador y finalista de varios certámenes a nivel nacional e internacional–, La Taberna del Zurdo. Eso sí, comimos sentados a una mesa, que también se puede, y tirando de las raciones de la carta.
Antes de que pienses que es más barato comprarnos un traje que invitarnos a comer, decir que éramos tres los que cenamos en La Taberna del Zurdo, por eso tanta ración… y casi sobró –la tercera en discordia comía muy poco–. Empezamos con la estrella de la casa: un lingote de oro. Foie, membrillo y chocolate blanco, cubierto con una lámina de oro presentado como un helado de palo.
Seguimos con platos que, a pesar de tener un origen tradicional, siempre buscan la sorpresa: patatas rellenas de ternera, sí, la ternera está dentro de la patata; tiras de cachopo de ternera con mozzarella e ibérico, una reinvención del cachopo; y roastbeef, tradicional con puré de patata. El postre, en este caso, tarta de queso. Todo exquisito y la sorpresa conseguida.
No nos lanzamos a la sección de “Un zurdo por el mundo” con platos internacionales con toques e ingredientes asturianos. Será en otra ocasión.
Precio: nosotros gastamos unos 30 € por persona (recuerda que éramos tres, también hay medias raciones y se puede comer menos, ja, ja, ja)
Dirección: C/ Cervantes, 27.
Web: latabernadelzurdo.com
Casa Amparo: comida tradicional y un buen menú del día
Muy cerca del ayuntamiento, junto a la plaza del Fontán, nos encontramos con un restaurante de comida tradicional y menú del día: Casa Amparo. ¿Qué tendrán los restaurantes que se llaman “Casa X” que siempre dan confianza? En el caso de éste, lo que tiene es una comida estupenda. Platos tradicionales, de esos que en una “Casa” tienen que estar buenos, y vaya que lo están.
En el comedor, en la primera planta, nos decantamos por entrantes de crujiente de espárrago triguero con bacon, pulpo a la brasa y calamares a la romana para seguir con los pescados del día: lubina y pixín. No puedes viajar a Asturias y no probar el pescado en todas sus variedades. De postre, como no podía ser de otra forma, arroz con leche requemado.
Ojo, que también hay platos de carne y, un clásico en la ciudad, arroces.
Precio: 14 € el menú del día en la planta baja, 16 € en la planta alta.
Dirección: Arco de los Zapatos, 6.
Web: restaurantecasamparo.com
Sidrerías en Oviedo, donde la sidra tiene hasta su bulevar
La sidra es un elemento fundamental en la gastronomía asturiana, de hecho, no todas las bebidas cuentan con sus propios lugares de venta con su nombre. Es más, en Asturias tienen una palabra más específica si cabe: chigre.
Oviedo, como capital de la comunidad autónoma, hace gala de su “sidrerismo” con un bulevar dedicado en exclusiva a la bebida de manzana. Hablamos de la Gascona, una calle en la que las sidrerías se suceden una tras a otra sin solución de continuidad a ambos lados. Elige la que más te llame la atención, seguro que aciertas.
La Pumarada, la sidrería que elegimos nosotros
¿Por qué elegimos La Pumarada entre todas? Porque nos dijeron que solía haber cantos de chigre por la noche. Por eso, y porque nos recomendaron la comida, que uno no va a una sidrería sólo a oír cantar.
Vaya por delante que fuimos a cenar y que la comida había sido el “Premio Gordo” de fabada y cachopo en La Corte de Pelayo, así que nuestra capacidad estomacal estaba muy limitada. ¿Qué elegimos de la carta? Poca cosa: un pixín a la espalda y un entrecote al cabrales –no podíamos dejar pasar la ocasión de disfrutar de uno de los quesos con denominación de origen de Asturias–. Y no, no hubo ni postre… Hay veces que es mejor elegir invitarnos a comer.
En la carta no faltan los platos típicos, como la fabada, las fabes con almejas o el pote asturiano; gran variedad de entrantes, nos quedamos con las ganas de probar los tortos con picadillo de chorizo y cabrales; arroces; embutidos; mariscos…
Al final, como nos habían comentado, disfrutamos de los populares cantos de chigre –te recomendamos quedarte en la planta baja, es donde suelen cantar–.
Precio: nosotros, con nuestra limitada cena, gastamos unos 22 € por persona (sin vino). Un primero y un segundo salen por unos 30 €, siempre sin vino.
Dirección: Gascona, 8.
Web: lapumarada.com
El mercado del Fontán: productos asturianos para llevarte en la maleta o en el estómago
Si lo tuyo es preparar la comida o si, como nosotros, consideras que no hay mejor recuerdo de un viaje que algo que se coma, no deberías dejar de pasar por el mercado del Fontán. Un mercado tradicional con estructura metálica en el que encontrarás desde las fabes hasta el compango de la fabada.
Como mercado de toda la vida, también hay pescaderías, fruterías, panaderías… Pero, aparte de comprar una pieza de fruta o un bollo para matar el hambre mientras recorres Oviedo –si es que es posible que te entre hambre después de pasar por los restaurantes–, no creemos que un pixín sea el mejor souvenir.
Comer en Oviedo también es cosa de golosos: pastelerías con historia
Más allá de los postres en los restaurantes –no te puedes ir de Oviedo sin probar un arroz con leche requemado–, los golosos se encontrarán en el paraíso. Los yambiones –golosos en asturiano– están de enhorabuena: el número y la calidad de las pastelerías de la capital del Principado dan para elegir. Así que tendrás que dejar un hueco en el estómago para pasar por ellas… aunque tampoco van mal como souvenir del viaje.
Te mencionamos alguna de las pastelerías históricas de Oviedo y su buque insignia. Camilo de Blas, fundada en 1827, con sus carbayones, unos pasteles de almendra y yema. Peñalba, fundada en 1928, con sus bombones. Rialto, que tiene sucursal en Madrid, con sus moscovitas, unas pastas de almendra y nada cubiertas de chocolate con más de 80 años de antigüedad, y sus princesitas, mazapán y yema bañadas con mermelada y azúcar. ¿Serás capaz de probarlos todos?
Lo decimos siempre, pero es que es cierto: nadie va a Asturias a hacer dieta… tendrás que llevar los kilos perdidos antes, porque allí vas a encontrarlos.
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